Reseña de la novela Frío
Por Paco Rabadán Aroca
‘El viejo oficio de matar’
Obra: Frío
Autor: Jordi Sierra i Fabra
Editorial: Amazon Publishing
Páginas: 222
Año: 2017
Género: Novela negra
Sobre el autor
Jordi Sierra i Fabra (Barcelona el 26 de julio de 1947).
Tiene una clara y firme vocación de escritor desde muy joven, pues confiesa que dio sus primeros pasos con tan sólo ocho años de edad. Con doce escribió su primera novela larga, de quinientas páginas.
Sus padres se mostraron poco entusiasmados con esta actividad, puesto que no confiaban en la profesión de escritor como un trabajo con futuro. Cuando terminó el bachillerato empezó a trabajar en una empresa de construcción. Tuvo sus primeras incursiones profesionales en la música, otra de sus grandes pasiones.
Fue uno de los fundadores del programa de la Cadena Ser «El Gran Musical», y en 1970 abandonó los estudios para convertirse en comentarista musical, lo que le permitió viajar por todo el mundo con grupos y artistas del momento para cubrir sus actuaciones y escribir reportajes.
Sinopsis de Frío
En su mundo aséptico de asesino a sueldo no había sitio para los sentimientos, aunque el destino le deparaba una sorpresa dulce, sensual y amarga a la vez. Cuando recibe el encargo de acabar con la vida de una bellísima mujer, Leo se enfrenta a un insospechado contratiempo: enamorarse no entraba en sus planes.
Pero las sorpresas nunca llegan solas y un nuevo giro de los acontecimientos da un vuelco a su vida. La pasión lo lleva a emprender una búsqueda obsesiva para desentrañar la verdad en un inteligente juego de intriga, erotismo y jazz, mucho jazz.
Al ritmo sincopado de las notas de Take Five y ambientada en la Barcelona actual, esta trepidante historia llena de sexo, sangre, sudor y lágrimas sigue la tradición de la mejor novela negra americana. Y es, sin duda, la más negra de las novelas de Jordi Sierra i Fabra.
Mi opinión sobre Frío
Reconozco mi atracción por los asesinos a sueldo, los conocidos comúnmente como sicarios. Me parece un perfil de personaje principal poco explotado en, la mayoría de las veces, encorsetada novela negra.
Los autores se nos vienen mostrando todo tipo de asesinos en sus obras.
Los que matan persiguiendo el poder, los movidos por celos u otros condicionantes colaterales a los sentimientos o —quizá los más comunes— los que se les junta el cable rojo con el verde y el cortocircuito resultante genera lo que llamamos «asesinos en serie», una suerte de pirado que mata para coleccionar dedos, orejas, etc., o que simplemente mata porque de niño su familia no le hacía mucho caso, o que el padre Sebastián le tocaba la colita en las frías noches del orfanato.
En fin, cualquier detonante parece bueno para volverse loco en un mundo de locos.
Por eso he disfrutado mucho de esta novela de Jordi Sierra, donde el personaje principal, Leo, hace de matar su profesión y la ejerce con la misma ausencia de emociones que la de un fontanero instalando un fregadero. Matar por dinero, para pagar el alquiler y los recibos de la luz.
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El asesino como instrumento de empresarios sin escrúpulos que quieren eliminar competidores, narcos que quieren dar lecciones de lealtad y, en general, una herramienta más de una sociedad embrutecida y amante de tomar atajos para la resolución de problemas.
La trama principal, en apariencia, se antoja manida: Leo, recibe el encargo de matar a una mujer, en concreto una prostituta de lujo, y le surge el conflicto personal de tener que incluir en su inventario de víctimas a una mujer.
Pero la habilidad del autor para complicar bastante más el asunto supera con creces esa aparente sencillez argumental. Como ya he dicho, el asesino es el personaje principal y está lleno de matices, detalles de su personalidad que se pondrán a prueba con el encargo.
Aparte de la esperada ración de sangre y violencia, como telón de fondo encontramos la Barcelona actual —tratada con la sordidez que nos gusta a los amantes del puro género negro— y una cantidad generosa de sexo entre sus páginas.
