Reseña de Se ofrece mezzosoprano para labores del hogar y otras dos piezas breves
Título: Se ofrece mezzosoprano para labores del hogar y otras dos piezas breves.
Autor: Luis Leante
Editorial: Murcialibro
Páginas: 131
Año: 2018
Género: Teatro
Valoración:
Sobre el autor
Luis Leante es un escritor murciano nacido en Caravaca de la Cruz en 1963. Allí mismo, en su tierra natal, decidió ambientar su primer libro, «Camino del juevesrojo», publicado en 1983. Estudió Filología Clásica en la Universidad de Murcia y durante más de 15 años trabajó como profesor de secundaria en Alicante impartiendo la asignatura de latín (hasta 2009).
Entre sus novelas más conocidas hay que resaltar «Paisaje con río y Baracoa de fondo», «El vuelo de las termitas», «La luna roja» o «Mira si yo te querré». Además, este autor español ha publicado obras de ensayo, poesía, teatro, relatos infantiles y guiones cinematográficos.
En 2007 fue reconocido con el Premio Alfaguara de Novela por «Mira si yo te querré», novela con la que por fin se dio a conocer al gran público. En 2016 se hizo con el Premio Edebé de literatura juvenil por «Huye sin mirar atrás», para ganar un año más tarde el IX Premio Hache con esa misma novela.
Sinopsis
Aseguraba Camilo José Cela que en nuestro país no se admitía de buena gana que un escritor pudiese frecuentar varios géneros y mucho menos que triunfase en todos, porque la pereza o la desconfianza nos llevan a encasillarlo en uno o dos y a interpretar que en los demás es simplemente un intruso. Con la publicación de estas piezas teatrales de Luis Leante (aplaudido por crítica y lectores en su faceta novelística, sobre todo desde la obtención del premio Alfaguara en 2007), MurciaLibro pretende apoyar la idea contraria: considerar que la calidad y el buen hacer literarios siempre han de ser aplaudidos, sea cual sea el formato con el que se nos presenten. Moviéndose entre el humor, la desesperación, el fracaso y el absurdo, los personajes de estas obras nos invitan a viajar por zonas oscuras del ser humano que quedan aquí maravillosamente retratadas y que nos obligan a reflexionar sobre nosotros mismos. ¿Te animas a emprender ese viaje?
Mi opinión
Hacía mucho tiempo que no leía teatro. Demasiado, tal vez. Tampoco es que sea una lectora asidua de este género, no vayáis a pensar, pero sí que he leído algún que otro libro de este género literario. A Luis Leante lo había leído en su premiada «Mira si yo te querré» y me ha gustado mucho descubrirlo en esta otra faceta suya, la de dramaturgo.
Es un libro cortito, poco más de cien páginas, en los que su autor logra condensar una cantidad enorme de temas arrebujados en tres pequeñas piezas teatrales, y ante los que es imposible quedar indiferente
La más larga de ellas, enfatizada en el título y la imagen de la portada, es un análisis de la vejez abrumador. Sí, ese sería el primer asunto que nos desenmascara el autor. Para ello contamos con un único personaje sobre el escenario y, no obstante, en su soledad sobre las tablas es capaz de sumergirnos en los entresijos de la ancianidad, en la dependencia, la enfermedad. Nos lleva a ese momento vital en el que el peso de los años remarca nuestro cuerpo, haciéndolo cada vez menos nuestro. El éxito o el fracaso de lo que hicimos deja de importar, porque, quizá, aquellos que nos aplaudían entonces, se han olvidado de nosotros ahora.
«Que sí, que sí, que ya voy a tomarte la tensión. No lo repitas más. Dichosa tensión que nos va a llevar a la tumba a todos»
Luis Leante mueve a su mezzosoprano por el escenario en un delirante monólogo, que no solo te hace pensar, sino que te arranca alguna sonrisa, quizá de esas que solo provoca el humor negro, y asombrarte. No podemos dejar de sorprendernos con las partes más oscuras del ser humano, y Luis las rodea de música, de recuerdos de tiempos pasados y de una locura exaltante en una narrativa directa, sencilla y llena de matices. Entre las tablas y los focos de estas páginas nos convertimos en testigos de cuando las pasiones se transforman en obsesiones, cuando la víctima se convierte en verdugo, el amor en odio y tus propios rincones llenos de polvo en justificación de tus actos… Lo que queremos ser y no llegamos a lograr, lo fácil que es culpar a otros de esos fracasos, el victimismo, la manipulación excusada en el amor, los celos…montones de emociones que la protagonista, única y maravillosa en su delirio, nos muestra entre arias, golpes de plumero y toques de campanilla.
«No, por favor, no se me ponga bravo. Y no me trate como a una de esas infelices a las que tenía encandiladas. A mí no puede engañarme. No tiene ningún poder sobre mí, ni lo tendrá nunca. Usted ya no es nadie. Nadie. Bueno, sí, un anciano decrépito de que ya nadie se acuerda, excepta la gente que tuvo que padecerlo».
En las otras dos pequeñas piezas que completan este gran pequeño libro, «Fuera del tiempo» y «Personajes», el autor nos hace reflexionar sobre la eternidad, la soledad, el silencio, el destino…
Leer a Luis Leante es estar en manos de quien domina el lenguaje y sus diferentes registros: novela, relato, cuentos, teatro…, pocas veces se encuentra un autor tan versátil al que merece la pena leer. En este libreto nos demuestra, además, que es un gran conocedor del alma humana, y que es capaz de crear en pocas páginas, personajes profundos que con pocas palabras nos obligan que a revisar esas partes más oscuras que todos escondemos para plantearnos, cuando por fin se baja el telón, si los límites entre unas partes y otras, están tan definidos como nos pensamos. O como nos gustaría. Y es que ya lo decía Alberto Cortéz en su canción «Soy un ser humano»:
«Por el hecho de ser un ser humano. Yo soy el constructor de mis virtudes, como lo soy a la vez de mis defectos. Torrente inagotable de inquietudes. Genial contradicción de lo perfecto».
