Reseña de Un trago antes de la guerra
Título: Un trago antes de la guerra
Autor: Dennis Lehane
Editorial: RBA
Año: 2009 (publicación en España)
Páginas: 333
Género: Novela negra
Calificación:
Sobre el autor
Dennis Lehane (Boston, 1965) es uno de los grandes nombres de la novela negra de las últimas dos décadas. Su estreno en la literatura vino en 1994 con, precisamente, Un trago antes de la guerra, la primera novela de su serie sobre los detectives de Boston Kenzie y Gennaro. Lehane es autor de celebradas obras que han sido adaptadas con éxito a la gran pantalla como Mystic River, Shutter Island o Desapareció una noche (Adiós pequeña adiós). Además de novelista, Dennis Lehane ha trabajado como guionista en reputadas series de televisión como la mítica The wire o Boardwalk Empire, firmando su primer guion cinematográfico con La entrega, película de 2014 protagonizada por Tom Hardy.
Reseña de Un trago antes de la guerra
Los detectives privados Patrick Kenzie y Angela Gennaro reciben el encargo de parte de un político de encontrar a una chica de la limpieza (negra, para más señas) que supuestamente ha robado unos documentos oficiales de suma importancia de su despacho. El caso les llevará a patearse las calles del heterogéneo Boston, sobre todo los barrios más castigados por la miseria y la delincuencia, entrando en contacto con violentos miembros de pandillas callejeras, policías corruptos y políticos sin escrúpulos que enredarán y complicarán una investigación que les llevará a descubrir lo que se esconde tras la verdad.
Un trago antes de la guerra es tan buena que cuesta creer que sea una ópera prima. Una novela escrita con ritmo y enjundia, con una prosa incisiva, irónica y certera que va montando el puzle de un complejo caso en el que afloran varios y capitales temas con los que tiene que lidiar la sociedad norteamericana contemporánea: racismo, corrupción a varias escalas, crimen organizado… La voz de Kenzie nos va guiando a través de un atractivo Boston del que no duda en mostrar sus miserias, su desigual estructura social y económica, así como un intrincado entramado político sustentado en favores, alianzas, chantajes y lo que se presente.
Kenzie y Gennaro, Gennaro y Kenzie, son duros (mucho) y lo saben. Él astuto, valiente y socarrón, ella inteligente y mesurada, nadie la hace de menos a pesar de vivir en mundo lleno de desgraciados y machistas. Su relación va mutando al calor de la historia, de la investigación y las balas, destacando tanto su química como su complementariedad, se necesitan aunque no estén del todo convencidos, siendo sus diálogos y conversaciones uno de los puntos atractivos de la novela. Junto a ellos toda una pléyade de secundarios que van desde politicastros con ínfulas a criminales callejeros (un buen montón) con sus propios códigos de conducta y leyes, pasando por unos agentes de policía que siempre miran por encima del hombro, como debe de ser, a estos detectives que tratan de hacer lo correcto en un mundo de lo más salvaje.
Y es que el Boston de Lehane es toda una jungla de asfalto, de bandas de esquina, de drogas y de tiroteos a plena luz el día, de la eterna lucha entre blancos y negros. Un contexto omnipresente que se convierte en un personaje más de la función, tanto por la gran cantidad de detalles, nombres y descripciones que nos regala Lehane como por que la ciudad se siente casi como un organismo vivo, dinámico y con entidad propia.
Un trago antes de la guerra es una novela negra potente y trepidante, plagada de acción y violencia, de personajes duros y un agradecido humor irónico de mano del narrador, una obra inteligente que no se limita a contar una investigación, sino que analiza la sociedad del momento, repasa el tejido social y saca a relucir la parte menos bonita (por decirlo de una manera elegante) de nuestro querido estado del bienestar.