«El joyero de la reina» de Nieves Herrero
Sinopsis de El joyero de la reina.
La historia de España a través de un joyero
Todos conocemos a la Nieves Herrero periodista, pues no en vano lleva casi cuarenta años en primera la primera línea del periodismo nacional. Pero quizá no se conoce tanto en su rol de escritora. Sin embargo, este es el décimo libro que publica, la octava novela, y con una trayectoria así, merece una atención especial. Antes de analizar la novela, he de advertir que, a lo largo de la misma, encontrarás frases de Victoria Eugenia, protagonista del libro. He aquí la primera:
«La felicidad es algo que perseguimos y nunca alcanzamos. Ser reina no te da la felicidad.»
El joyero de la reina llegó a mis manos al conocer que sería ella la invitada principal en la Feria del libro de Mula, mi ciudad. Además, me habían concedido el privilegio de acompañarla en el escenario de la presentación, por lo que me puse manos a la obra en su lectura. No me costó ningún trabajo engancharme a la historia, pues ya llevo en mi ADN la curiosidad por todos los pormenores de la historia, esa historia que no se encuentra en los libros generalistas y que necesita de una gran labor de documentación para poder contarla con todas las garantías. Es digno de encomio el trabajo documental que la autora ha realizado. Debo resaltar que narra la apasionante historia de la reina Victoria Eugenia (Ena, como la llamaban en la familia), quien falleció hace 53 años, lo que debería haber complicado esta labor de documentación. Sin embargo, se perciben detalles que no serían conocidos si no hubiese accedido al epicentro de la familia, a los descendientes y a la gente cercana a ellos.
«Ser reina significa no tener vida propia. Solo se vive por y para tu pueblo.»
El libro comienza, tras la entradilla con la reina Letizia preguntando por la historia de las joyas que Sofía le acaba de pasar, con el atentado que sufrió el mismo día de su boda de manos del anarquista Mateo Morral y en el que hubo veintiocho fallecidos y un centenar de heridos. Marca de esta forma un ritmo alto en su inicio, que irá modulando de forma magistral con sus picos y valles, deteniéndose en ciertos momentos para que las escenas casi queden congeladas en la mente del lector, para después volver a arrancar e imprimir un nuevo cambio de ritmo. No hace falta resaltar que se notan las tablas de periodista, documentalista y contadora de historias que Nieves posee.
«Soy una reina en el exilio. No existe nada más doloroso. Bueno sí, peor es pensar que tu pueblo ya no te quiere.»
Pero no solo es una historia monárquica, con el aliciente de las disputas entre María Cristina, madre de Alfonso XIII y, por tanto, suegra de la protagonista, puesto que la reina Victoria Eugenia fue una mujer adelantada a su tiempo: cambió la monarquía española introduciendo el color en una corte enlutada, e impuso la costumbre de fumar y beber en público como los hombres. Por todo ello, las diferencias entre Victoria Eugenia y la reina María Cristina se hacían cada vez más notables, y la madre del rey le reprochaba que ella era la reina de España y no la reina de Inglaterra, por las diferencias culturales entre ambas cortes. También tiene un peso específico la familia García-Ansorena, quienes tenían tanta confianza con la familia real que cuando Ramiro entraba en palacio le anunciaban como «de Casa». Fue un gran apoyo para la reina ya que hablaba idiomas y podía entenderse con ella perfectamente. Gracias a sus largas conversaciones sobre joyas consiguió que olvidara muchas de las penalidades que le tocó vivir. De este modo, se construye una historia paralela, donde existe una continua comparación entre la vida de la alta sociedad y la de una familia de clase media de la época. Un detalle delicioso que deja a la vista las enormes diferencias entre clases sociales.
«Nada dura para siempre. Hay que estar preparados para marcharse hasta del lugar más hermoso.»
Es obligatorio hacer una mención a los personajes principales de la novela, pues son, en su mayoría, de un calado histórico:
- LETIZIA ORTIZ: La curiosidad de la reina Letizia abre la novela de Nieves Herrero. Es la flamante reina que pide que le cuenten la historia de las joyas que pertenecieron a la bisabuela de su marido, la reina Victoria Eugenia.
- VICTORIA EUGENIA, BISABUELA DEL REY FELIPE VI: Nieta de la reina británica Victoria I. Recibió una estricta educación desde niña. Su fiel dama de compañía era la ilustrada lady William Cecil –baronesa Amherst of Hackney y una de las mujeres más interesantes de la corte inglesa–. Con ella compartió secretos y confidencias. Para Victoria Eugenia las joyas «tenían una fuerza y una carga magnética que las hacía no solo bellas, sino protectoras». Impulsó, entre otras acciones, la formación especializada para las mujeres que quisieran aprender enfermería. Tras su exilio después de la proclamación de la Segunda República el 14 de abril d e1931, Victoria Eugenia solo volvió a España para el bautizo de su bisnieto: Felipe de Borbón y Grecia. Franco le dio permiso para entrar en España y acudir a este bautizo de tanto significado para la continuidad dinástica. Un año después de esta visita, tras una caída en el palacio de los Grimaldi, murió en Lausana.
- ALFONSO XIII: Se trata del IX monarca de la Casa Borbón. Fue un niño criado y consentido por su madre, María Cristina de Habsburgo-Lorena, que ejerció la regencia hasta la mayoría de edad de su hijo. Estuvo siempre rodeado de mujeres que cumplieron su voluntad. Aunque Victoria Eugenia y él se casaron muy enamorados, pronto empezó a tener amantes. Murió en el exilio, en Roma.
- RAMIRO GARCÍA-ANSORENA: El joven joyero era un hombre que hablaba varios idiomas. Conoció a Victoria Eugenia pocos días antes de su boda, el 30 de mayo de 1906. Su padre y su abuelo habían sido joyeros de la Casa Real. Ramiro y la reina Victoria inician una bonita amistad que continuará hasta el final de sus días.
- LADY WILLIAM CECIL: baronesa Amherst of Hackney y una de las mujeres más interesantes de la corte inglesa, dama personal de Victoria Eugenia. Era como su hermana mayor. Gran viajera y estudiosa de la Arqueología Egipcia. Pionera en las excavaciones de Egipto y mecenas de Howard Carter, descubridor de la tumba de Tutankamon. Experta en joyas antiguas. Le regala varias. Con ella aprende la diferencia entre las joyas de la corona inglesa y la española.
- LA REINA MARÍA CRISTINA: Marca la vida del palacio. No comparte los cambios que hace Victoria Eugenia en la Corte. El día que tiene más acercamiento a ella, es el día que le muestra sus joyas. Las dos apoyaron bandos distintos durante la Gran Guerra. Siempre intentó solucionar los problemas que surgen en la Corte por los devaneos de su hijo con el servicio y sus consecuencias.
- JACOBO FITZ JAMES: duque de Alba. Amigo y fiel servidor del rey. Le confiesa Alfonso XIII su desapego y resquemor contra la reina. Cree que no le advirtieron del mal de la sangre que transmitían las mujeres de la familia inglesa. La Casa de Alba, siempre fue fiel a la Corona de España. Cuando regresó la reina del exilio para el bautizo de su bisnieto Felipe, se alojó en el Palacio de Liria.
Las verdaderas protagonistas de la novela
No, no son ningunos de los que acabo de nombrar. Las verdaderas protagonistas son las joyas de la novela. A lo largo de las más de seiscientas páginas conocerás la tiara de las flores de lis, los chatones de la reina, el broche de perlas grises, las aguamarinas, los rubíes, los zafiros y la más especial de todas: la «peregrina». Una joya con una historia propia que merece la pena que conozcas leyendo «El joyero de la reina».
Además, a través de sus páginas podrás pasear por el Madrid de primeros del siglo XX, por el Palacio de La granja, el de Miramar o el de La Magdalena, aparte de acompañar a Victoria Eugenia en su exilio. Y si a esto le sumamos que asistirás a las bodas de Victoria Eugenia y Alfonso XIII, de don Juan y doña María de las Mercedes, de don Juan Carlos y Sofía e incluso la de doña Letizia Ortiz y don Felipe de Borbón, el viaje literario se asegura como merecido.
Llega el momento de acabar esta reseña, y, para ello, utilizaré una última frase de la reina Victoria Eugenia:
«Nada dura para siempre. Hay que estar preparados para marcharse hasta del lugar más hermoso.»
Puedes leer otras de mis reseñas en: Sección Jesús Boluda del Toro.
Ficha técnica A propósito de Batman
Título: El joyero de la reina
Autor: Nieves Herrero
Editorial: Ediciones B
Año: 2021
Páginas: 640