Reseña de El hombre en busca de sentido

Título: El hombre en busca de sentido

Autor: Viktor Frankl

Editorial: Herder

Año: 2021

Género: Ensayo

Páginas: 162

Calificación: 

Sobre el autor

Viktor Frankl (Viena 1905-1997) fue un neurólogo, psiquiatra y filósofo austríaco, fundador de la logoterapia, una psicoterapia construida en torno al sentido, a la guía para descubrir el sentido de nuestra propia vida. Frankl estuvo prisionero desde 1942 a 1945 en varios campos de concentración nazis, incluyendo los tristemente célebres de Auschwitz y Dachau. De su experiencia en aquel infierno escribió El hombre en busca de sentido, libro que se convirtió en un éxito de ventas y obra de referencia dentro de la literatura del Holocausto.

Reseña de El hombre en busca de sentido

Primera parte: Un psicólogo en un campo de concentración

«Seguir vivo exigía la muerte de otro»

Nunca estás del todo preparado cuando un libro de estas características cae en tus manos, ni aun imaginando lo que te puedes encontrar en su interior. Testimonios sobre el horror del Holocausto judío que tuvo lugar durante la Segunda Guerra Mundial hay unos cuantos, todos estremecedores, todas valiosas lecciones de superación desde variadas perspectivas y sensibilidades. Quizás lo que hace especial a la obra de Frankl en comparación a las demás sea su narración desde un doble posicionamiento: como prisionero y como psicólogo, ofreciendo una visión de lo más profunda.

En la primera parte de El hombre en busca de sentido, Frankl nos ofrece el relato de sus casi tres años sobreviviendo en distintos campos de concentración sometido a terribles trabajos forzados en las peores condiciones imaginables, pasando miles de penurias (palabra que se queda muy corta para describir su tormento) y vejaciones (tanto físicas como psicológicas), aflorando en el proceso una serie de fases y sensaciones que le llevan a descubrir la respuesta a uno de esos interrogantes que la humanidad se hace desde los albores del tiempo.

«Había aprendido a dejar que el destino siguiera su curso»

De la costumbre al horror (no sabemos cómo lo hacemos, pero nos acostumbramos absolutamente a todo), pasando por el escudo de la anestesia emocional, el individuo casi despojado de sentimientos sin metas más allá de la mera supervivencia, aferrado al menor resquicio de vida en un contexto regido por un sufrimiento omnipresente. Esta primera parte es dura de leer, mucho, pero la narración de Frankl, imbuida siempre de un delicado espíritu humanista, cruda pero con sus píldoras de esperanza, la convierten en una experiencia del todo enriquecedora.

Segunda parte: Conceptos básicos de logoterapia

«El hombre no inventa el sentido de su vida, sino que lo descubre»

En la segunda parte del libro, Viktor Frankl ahonda en su logoterapia, ofreciéndonos valiosas enseñanzas, su filosofía de vida. La búsqueda del sentido de la vida por parte de cada individuo es como la gasolina que necesitamos para seguir funcionando. Y sí, el sentido de la vida incluye el sufrimiento, nuestra actitud ante éste será todo un reto por superar, constituyendo uno de los mayores logros vitales el seguir adelante a pesar de/ acompañado por el dolor. Sabemos de sobra que la vida es una montaña rusa emocional, con interminables cuestas, tranquilas líneas rectas y bruscas caídas, aceptar esto forma parte del juego.

Quizás la clave esté en no desistir, sean cuales sean las circunstancias, enfocarse hacia todas esas cosas por las que merece la pena vivir, esos «dones de la existencia» de los que habla Frankl, con la belleza y el amor por bandera. Decía Nietzsche que quién tiene un porqué para vivir puede soportar casi cualquier cómo, una máxima que Viktor Frankl conoció en propia carne y trató de aplicar en sus pacientes durante toda su carrera. Porque, al final, todo es una cuestión de actitud, ante lo bueno (más fácil) y ante lo malo (esa pesada losa llamada sufrimiento), del sacrificio que estamos dispuestos a hacer para superar obstáculos y alcanzar la felicidad.

El hombre en busca de sentido es una obra que invita a una reflexión constante contigo mismo, una mirada de frente a la vida, que trata a las personas como personas, no como números o máquinas, del rico mundo interior y las particularidades de cada uno, de cada momento único. No en vano, como asevera Frankl, es el hombre el que decide si cede ante las circunstancias o si se enfrenta a ellas.

Agradecimiento especial a mi amiga Basi Alburquerque por regalarme este inspirador libro. Os recomiendo que visitéis Flowrece, su web de yoga y meditación donde lo más importante es uno mismo.

El hombre en busca de sentido en Herder Editorial