Reseña de La hija de la española

Reseña de la novela La hija de la española

‘Una novela brillante y abrumadora que instiga a pensar en la propia literatura y en la sociedad’.

TITULO: La hija de la española

AUTOR: Karina Sainz Borgo

EDITORIAL: Lumen

PÁGINAS: 220

AÑO: 2019

GÉNERO: Novela contemporánea e Hispanoamericana

Sobre la autora

Karina Sainz Borgo periodista y escritora venezolana, Caracas en 1982. Reside en España desde 2006.

Ha trabajado para medios de comunicación españoles como Vozpópuli, Zenda u Onda Cero. Periodista cultural y autora de libros de periodismo como Caracas hip-hop (Caracas, 2007) y Tráfico y Guaire. El país y sus intelectuales (Caracas, 2007). Recientemente, acaba de lanzar su segunda novela El tercer país (Ed. Lumen). La autora ha sido comparada con Borges y Coetzee por la crítica internacional.

La hija de la española es su primera novela de ficción. Su obra ha sido vendida en veintidós países. La revista estadounidense Time incluyó este título entre los 100 libros más importantes del año 2019. Ganadora del Grand Prix de l’Héroïne Madame Figaro, el International Literary Prize, finalista del Kulturhuset Stadsteatern Stockholm y nominada al LiBeraturpreis.

Sinopsis de La hija de la española

Adelaida Falcón, una maestra caraqueña, fallece tras una larga enfermedad. Su hija Adelaida, de treinta y ocho años, no tiene a nadie y vive en una ciudad donde la violencia marca el ritmo diario de la existencia. Poco tiempo después del entierro, encuentra su casa tomada por un grupo de mujeres a las órdenes de la Mariscala.

En ayuda, llama a la puerta de su vecina sin hallar respuesta: Aurora Peralta, a quien todos llaman «la hija de la española», ha muerto. En la mesa del salón, Adelaida encontrará una carta que comunica la concesión del pasaporte español: un salvoconducto para huir del infierno.

Mi opinión de La hija de la española

Confieso que soy de las que me gustan los principios; suelo fijarme en las dedicatorias y referencias que hacen los autores en sus primeras páginas antes de comenzar la novela. Eso me hace presuponer de qué tratará el libro, aunque a veces mi divagación no suela ser siempre certera. Esta concretamente me pareció deliciosa y bella:

“A las mujeres y hombres que me antecedieron. Y a los que vendrán”

Siguiente… paso página y me encuentro con la primera frase que inicia la novela: “Enterramos a mi madre con sus cosas: el vestido azul, los zapatos negros sin cuñas y las gafas multifocales. No podíamos despedirnos de otra manera. No podíamos borrar de su gesto aquellas prendas. Habría sido como devolverla incompleta a la tierra”. Karina… ahí terminas de romperme.

La que no podía era yo parar de leer. Y así continúa el libro captando toda tu atención, con una autora que domina las metáforas vivas con una fluida alternancia de escenas, y condensa una mezcla ágil y amena, entre la recuperación de un pasado  nostálgico con un presente violento, complejo y duro. 

Tenemos en esta novela una apabullante tensión sobre un Estado totalitario  que se une con la delincuencia, un desgobierno político en una ciudad donde impera la violencia para destruir a una sociedad vulnerable de clase media, donde sobrevivir se convertirá en la única ley de sus ciudadanos.

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Una cruel realidad sobre Venezuela, donde hay que luchar por un trozo de pan o conformarse de que tú trozo no llegue en días y sea arrebatado por otros, donde salir a la calle sea asegurar tu propia muerte, hasta que todo lo tuyo deja de serlo de la noche a la mañana o en cualquier momento: si te roban tus cosas, tu casa, tus pertenencias, tus recuerdos o lo único que puede hacerte tener más cerca a tu recién fallecida madre, ¿estaría mal robar una identidad cuando ya estás sola y muerta en vida si crees que es tu única salvación?, ¿hasta dónde una persona desesperada llegaría por sobrevivir, haciendo cosas que en condiciones normales nunca se plantearía?.

Lo que haces en contra de tu voluntad, tus propios principios éticos  ¿lo genera acogerse a la única luz, la única escapatoria?

Narrativa impactante de esta autora sin un desliz, que nos inducirá a una profunda reflexión de los valores imperantes y olvidados de la historia y de la dignidad de las personas. Observaremos como confluyen escenas perversas que no persiguen el miedo, sino un vértigo cercano. 

Una novela brillante y abrumadora que instiga a pensar en la propia literatura y en la sociedad.

Querida Karina, esta mañana leía yo a Sabina Urraca decir que sintió una gran envidia de no haber sido ella quién escribiera un libro así de una autora que ella editaba. Más o menos (aunque con una notable diferencia en la comparativa) lo mismo te digo, ojalá llegue yo a escribir algún día una primera novela como la tuya. 

“La vida fue aquello que pasó. Aquello que hicimos y nos hicieron. La bandeja donde nos abrieron por la mitad como un pan a punto de crecer”. (Karina Sanz)